Ayer 16 de marzo, la Comisión Europea introdujo el requisito de autorización previa por parte de los Estados miembros para todas las exportaciones de equipos de protección individual (EPI) fuera de Europa. La medida, adoptada con arreglo al procedimiento de urgencia durante un período de seis semanas, tiene por objeto garantizar la disponibilidad de estos equipos en el mercado único de la UE. Tal como se explica en la declaración de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, esta medida se inscribe en un triple enfoque: la Comisión trabaja con la industria para aumentar la producción, adopta medidas para mantener en la UE los equipos de protección que necesitamos y se esfuerza porque estos equipos estén accesibles en Europa para que podamos compartirlos.